La Guardia Urbana de Barcelona cifra en 25.000 las personas que han disfrutado de la verbena de Sant Joan en las playas de la capital catalana. La cifra está muy por debajo de la del año 2019, cuando fueron 60.000 los barceloneses que trasladaron la fiesta a la playa.
El teniente de alcalde de Prevenció i Seguretat del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha asegurado este jueves que a pesar del puente, mucha gente que se ha quedado en Barcelona ha limitado la celebración al ámbito familiar.
Batlle ha aplaudido el espíritu "lúdico y cívico" de la población en una verbena "normal" y prácticamente sin incidentes destacados. Las playas han podido reabrir con normalidad a las 9 de la mañana.
El Servei d'Emergències Mèdiques (SEM) ha atendido a cinco personas por quemaduras, a 14 por agresiones y
a 68 por intoxicaciones
Las playas han podido reabrir con normalidad a las 9 de la mañana.
"Ha sido una noche muy tranquila y se han cumplido los objetivos de control y vigilancia", ha asegurado Batlle. El responsable municipal descarta, a partir del primer análisis de los datos policiales, incidentes destacados en las playas, así como en el frente marítimo de Sant Martí y Ciutat Vella.
Batlle también considera que los dispositivos para evitar problemas de civismo en espacios "significativos" de la ciudad, como la Barcelona o la Vila Olímpica han alcanzado sus objetivos. "La concentración más importante de personas se ha dado en las playas. En las calles ha habido ambiente de fiesta, pero sin ningún tipo de incidente", afirma.
En este sentido, el teniente de alcalde apunta a un "comportamiento cívico generalizado" de la ciudadanía que ha permitido también un desalojo y puesta a punto de las playas "puntual". Según la estimación del consistorio, el volumen de basura retirada de las playas estará alrededor de las 8 toneladas de residuos.
En el capítulo de incidentes, los más destacados han sido algunos incendios. Según el balance municipal, han quemado 64 contenedores, 15 zonas de matojos en la vía pública, 13 árboles, dos vehículos, dos balcones y un colchón. También se han producido 8 fuegos de mobiliario urbano, cinco fuegos forestales de una superficie quemada inferior a los 150 metros cuadrados y se han tenido que apagar seis hogueras.
El Servei d'Emergències Mèdiques (SEM) ha atendido a cinco personas por quemaduras, a 14 por agresiones y a 68 por intoxicaciones. Los datos, explica Batlle, están "dentro de los parámetros de la más absoluta normalidad". Tampoco le consta al consistorio ningún incidente por agresiones machistas durante la noche de la verbena.
La alcaldesa, Ada Colau, ha aplaudido el comportamiento de los vecinos por haber hecho posible una noche "más tranquila que otros años" gracias al civismo de la ciudadanía. El descanso de los vecinos y la buena imagen de la ciudad, ha dicho la alcaldesa, es "corresponsabilidad" de todos.
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